El universo del CBD incluye una variedad de extractos, fórmulas y presentaciones que pueden despertar muchas preguntas, sobre todo si estás comenzando o quieres comprender mejor las diferencias que existen entre sus distintas formas. Sea que estés empezando y quieras saber por dónde ir, o lleves tiempo usando CBD y busques aclarar algunas preguntas, este artículo está pensado para ti. ¿Cuál es la diferencia entre los tipos de CBD? ¿Qué significa eso de espectro completo o aislado? ¿Y qué tipo de producto encaja mejor con lo que estás buscando?
¿Qué tipos de espectro tiene el CBD?
Una de las formas más importantes de diferenciar los tipos de CBD es por su «espectro». Este término hace referencia a los compuestos que permanecen en la fórmula final después del proceso de extracción del cáñamo. Esta planta contiene muchos más componentes aparte del cannabidiol: hay terpenos, que son las moléculas responsables del aroma; flavonoides, con propiedades antioxidantes; y otros cannabinoides menos conocidos como el CBG o el CBN. Según el proceso, un extracto puede conservar todos estos elementos, solo algunos, o únicamente el CBD.
CBD de espectro completo (Full Spectrum)
El CBD de espectro completo conserva una gran parte de los compuestos naturales presentes en la planta de cáñamo. Esto incluye cannabinoides secundarios, terpenos y una pequeña cantidad de THC que siempre se mantiene por debajo del límite legal permitido (0,2 % en España).
Esta combinación permite lo que se conoce como «efecto séquito», una hipótesis descrita por Ethan Russo (2011), que plantea la posibilidad de que los distintos componentes del cáñamo interactúen entre sí para potenciar sus propiedades. Por eso, si te interesa una experiencia más rica y cercana a la composición vegetal original, esta podría ser una buena alternativa.
CBD de amplio espectro (Broad Spectrum)
El CBD de amplio espectro mantiene muchos de los compuestos del cáñamo, como los terpenos y los cannabinoides secundarios, pero pasa por un proceso adicional que elimina el THC por completo. Esto significa que sigue siendo un extracto complejo y con variedad de elementos vegetales, pero sin la presencia del tetrahidrocannabinol.
Es una opción especialmente útil si prefieres no preocuparte por las implicaciones del THC pero valoras fórmulas más completas y cercanas a la naturaleza de la planta.
CBD aislado o puro (CBD Isolate)
El aislado de CBD es una forma muy precisa de trabajar con este cannabinoide. A través de técnicas de purificación, se obtiene un compuesto que contiene solo cannabidiol, sin restos de terpenos, flavonoides ni otros cannabinoides.
Este formato se suele recomendar si tu prioridad es la pureza del CBD, o si buscas evitar por completo otros compuestos de las plantas. Es frecuente en entornos donde se requiere mayor control, como al estar bajo ciertos tratamientos médicos o por razones profesionales.
Tipos de presentaciones del CBD
Además del tipo de espectro, también puedes distinguir el CBD por los formatos en que se encuentra disponible. Las presentaciones varían no solo en forma o tamaño, sino también en experiencia, forma de aplicación y perfil sensorial. Aquí te mostramos las más comunes para que puedas identificar la que mejor se adapta a lo que necesitas.
Flores o cogollos de CBD
Las flores de CBD, conocidas también como cogollos, son las partes visibles de la planta que se recolectan y se secan cuidadosamente para conservar su aroma, estructura y composición natural. Proceden del cáñamo industrial, con bajo contenido de THC y un porcentaje significativo de CBD.
Lo interesante de este formato es la variedad: cada flor puede ofrecer un perfil diferente de aromas, matices y texturas. Algunas tienen notas cítricas, otras son más terrosas o frutales. Los Mini Buds CBD forman parte de esta categoría; son cogollos más pequeños que comparten las mismas propiedades que los grandes, pero resultan una opción más accesible y económica si deseas probar distintas variedades.
Aceites de CBD
Los aceites de CBD son una de las presentaciones más utilizadas y versátiles. Se preparan mezclando un extracto de cannabidiol con un aceite portador vegetal, como el de coco, oliva o cáñamo. Esta base permite que el CBD se estabilice y sea fácil de aplicar.
Los aceites pueden tener distintas concentraciones, desde un 3 % hasta niveles más altos como 30 o 40 %. También existen versiones que incorporan ingredientes naturales como camomila, vitamina D o cannabinoides como el CBG, lo que amplía las posibilidades de uso. ¿Sabías que el CBD puede ser usado también por animales? (Corsato Alvarenga et al., 2023) Encontrarás también aceites CBD para mascotas, con ingredientes y concentraciones adecuados para su organismo.
Hash o resinas de CBD
El hash de CBD es una presentación sólida y concentrada que se obtiene a partir de la resina del cáñamo. Según el método de elaboración, su textura puede ir de cremosa a más seca o compacta. Se utilizan técnicas como el tamizado en seco o el prensado mecánico para concentrar los compuestos activos.
Este tipo de producto se valora por su intensidad, tanto en aroma como en densidad vegetal. Cada variedad de hash puede presentar matices distintos: desde notas especiadas y terrosas hasta fragancias más dulces. Su aspecto artesanal y su potencia lo hacen atractivo para quienes buscan una experiencia más concentrada.
Cosméticos con CBD: cremas, bálsamos y productos tópicos
En el ámbito del cuidado corporal, el CBD también ha encontrado su lugar. Hoy puedes encontrar una amplia gama de cosméticos que lo incluyen como ingrediente activo: cremas hidratantes, bálsamos labiales, pomadas o aceites para masajes.
Estos productos están pensados para aplicarse sobre la piel y suelen combinar el cannabidiol con extractos vegetales como aloe vera, manteca de karité o aceites esenciales. Aunque las investigaciones siguen en curso, muchos los integran en rutinas de bienestar por su textura, su potencial efecto calmante y su versatilidad en el uso tópico.
¿Cómo elegir el tipo de CBD más adecuado para ti?
Tomar una decisión puede parecer difícil con tantas opciones disponibles, pero no tiene por qué serlo. Lo primero que te recomendamos es pensar en tus objetivos y en qué tipo de experiencia estás buscando. ¿Prefieres una fórmula lo más natural posible? ¿Te interesa evitar el THC por completo? ¿O valoras una opción precisa y sin otros componentes vegetales?
Si te atrae la idea de mantener la mayor cantidad posible de compuestos de la planta, el espectro completo podría resultarte atractivo. Si buscas evitar el THC pero sin renunciar a la riqueza vegetal, el amplio espectro puede ser una buena alternativa. Y si necesitas una fórmula sencilla, el aislado de CBD te da claridad y control sobre lo que estás usando.
También es importante pensar en la presentación. Algunas personas prefieren la experiencia sensorial que ofrecen las flores, otras eligen aceites por su versatilidad y facilidad de dosificación. Las resinas pueden ser una forma de explorar una textura distinta, y los cosméticos ofrecen una vía tópica sencilla para integrar el CBD en tu rutina diaria.
Conclusión
Explorar los distintos tipos de CBD es una invitación a conocer más sobre un mundo vegetal con muchas posibilidades. Aprender a distinguir los espectros, las fórmulas y las presentaciones no solo te da más herramientas para elegir, sino que te permite hacerlo con tranquilidad.
Ya sea que prefieras una flor con aroma intenso, un aceite con ingredientes naturales, una resina artesanal o un cosmético de uso externo, en Maionais creemos que lo importante es que entiendas qué estás usando y por qué. Tomar decisiones informadas es, también, una forma de cuidar tu bienestar.
Referencias
Russo E. B. (2011). Taming THC: potential cannabis synergy and phytocannabinoid-terpenoid entourage effects. British journal of pharmacology, 163(7), 1344–1364. https://doi.org/10.1111/j.1476-5381.2011.01238.x
Corsato Alvarenga, I., Panickar, K. S., Hess, H., & McGrath, S. (2023). Scientific Validation of Cannabidiol for Management of Dog and Cat Diseases. Annual review of animal biosciences, 11, 227–246. https://doi.org/10.1146/annurev-animal-081122-070236